En el corazón de la Ciudad Vieja de Jerusalén, a principios de diciembre, se abre un pequeño y nuevo reino encantado. Con el nombre de “Ho Ho Holy Land”, aquí se ha instalado Papá Noel. ISSA KASSISSIEH Papá Noel “Hace diez años me puse por primera vez el vestido rojo, mientras iba a Jaffa Gate para distribuir árboles de Navidad. Allí vi que, mientras era Papá Noel, todos eran más felices y me dije: ‘Guau, esto hace que la gente esté contenta’. Y me gusta hacer feliz a las personas y niños de Jerusalén.” Las navidades han ido pasando hasta que el año pasado Issa tomó un vuelo a Denver, Estados Unidos, donde asistió a un curso, junto a otros aspirantes a Santa Claus procedentes de todo el mundo. Al finalizar obtuvo un diploma oficial, así como el impulso para iniciar algo nuevo en la tierra que custodia por excelencia el inicio de la Navidad. ISSA KASSISSIEH Papá Noel “Es entonces cuando decidí abrir la casa de Papá Noel en Jerusalén, después de diez años. Creo que es una experiencia bonita para el resto de personas, y también nueva. No había nada parecido: Es la primera vez que se abre una casa de Papá Noel en Tierra Santa y precisamente en la ciudad vieja de Jerusalén.” La casa acoge cada mañana a niños y jóvenes de las escuelas de los alrededores y cada tarde a familias y curiosos, atraídos por la decoración y la música. En el interior hay una sección dedicada a dulces navideños, un taller de juguetes, un belén (para no olvidar el auténtico significado de la Navidad) e incluso un lugar donde recibir un certificado de haber sido buenos durante el año. Serenidad no es la palabra dominante en 2017 en Tierra Santa. La casa de Papá Noel representa así una pequeña gota, que contribuye a dibujar una sonrisa en los chicos de esta tierra. ISSA KASSISSIEH Papá Noel “Este es mi objetivo, mi verdadero objetivo: Traer un poco de serenidad a los chicos y a las familias de Tierra Santa. Recibo entre 25 y 30 mensajes cada día que me explican lo que viven los chicos, cómo reaccionan… “Sus caras muestran el espíritu de la Navidad. Gracias, gracias por lo que hacéis por nosotros” (me escriben) y para mí es realmente un honor. Me hace feliz ver la sonrisa de los niños de Tierra Santa.” Read More